Hace una semana tuve la oportunidad de escuchar un mensaje del Presidente de COPARMEX Jalisco, el Sr. Oscar Benavides, en el marco de la sesión especial por el XXI Aniversario del Club Toastmasters en el que participo desde hace casi siete años. Siendo nuestro invitado especial, se le cedió la palabra, resultando éste un mensaje que invitó a la reflexión, al menos en mi persona.
El mensaje giró en torno a la responsabilidad social y de cómo en una gira empresarial por Europa le preguntaron cuál era el "índice de participación empresarial" en su ciudad de origen, cosa que comenta que no pudieron contestar al no ser conocido ese factor en este entonces en México y mucho menos medido. Dicho índice tiene que ver con cuántos de los empresarios de la región participan en actividades de índole social, superación personal o de apoyo comunitario, adicionales a sus actividades productivas en su empresa. Se supone que a mayor el índice, mayor participación de los empresarios en asuntos de su comunidad y por ende, mayor bienestar social y "sensibilización" ante las necesidades de la sociedad en su conjunto.
Quise escribir sobre este tema en el blog, pues de inmediato lo extrapolé a la sociedad tapatía en general: ¿cuántos de nosotros participamos en actividades adicionales a nuestras "obligaciones"? ¿O estamos en la creencia de que con cumplir en un trabajo lícito o asistir a la escuela estoy cumpliendo? La reflexión personal fue obligada e hice un recuento de mis actividades en los últimos años adicionales a mi trabajo, resultando una lista muy nutrida y que en todos los casos me ha dejado mucho: desde la misma participación en Toastmasters, desarrollando mis habilidades para hablar en público y potenciando mi capacidad de liderazgo, hasta como voluntario en la mesa directiva del condominio en donde habito.
Si queremos que nuestra sociedad sea mejor, no se dará por generación espontánea; es necesario que nosotros que la conformamos nos comprometamos con los demás, busquemos el bien común no solo como un deseo, sino con acciones concretas: participación en asociaciones civiles que promuevan el cuidado del ambiente, de la movilidad en la ciudad, de la educación, del desarrollo integral de los niños, de la atención a grupos vulnerables, etc.
Pagar impuestos y no trasgredir la ley no es todo lo que debemos hacer para ser considerados "buenos ciudadanos", lo seremos cuando aportemos ese extra que nuestro México pide y que en nuestra ciudad se haría más evidente, logrando entre todos una mejor Guadalajara.
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22 de enero de 2012
Índice de participación ciudadana
Hace una semana tuve la oportunidad de escuchar un mensaje del Presidente de COPARMEX Jalisco, el Sr. Oscar Benavides, en el marco de la sesión especial por el XXI Aniversario del Club Toastmasters en el que participo desde hace casi siete años. Siendo nuestro invitado especial, se le cedió la palabra, resultando éste un mensaje que invitó a la reflexión, al menos en mi persona.
El mensaje giró en torno a la responsabilidad social y de cómo en una gira empresarial por Europa le preguntaron cuál era el "índice de participación empresarial" en su ciudad de origen, cosa que comenta que no pudieron contestar al no ser conocido ese factor en este entonces en México y mucho menos medido. Dicho índice tiene que ver con cuántos de los empresarios de la región participan en actividades de índole social, superación personal o de apoyo comunitario, adicionales a sus actividades productivas en su empresa. Se supone que a mayor el índice, mayor participación de los empresarios en asuntos de su comunidad y por ende, mayor bienestar social y "sensibilización" ante las necesidades de la sociedad en su conjunto.
Quise escribir sobre este tema en el blog, pues de inmediato lo extrapolé a la sociedad tapatía en general: ¿cuántos de nosotros participamos en actividades adicionales a nuestras "obligaciones"? ¿O estamos en la creencia de que con cumplir en un trabajo lícito o asistir a la escuela estoy cumpliendo? La reflexión personal fue obligada e hice un recuento de mis actividades en los últimos años adicionales a mi trabajo, resultando una lista muy nutrida y que en todos los casos me ha dejado mucho: desde la misma participación en Toastmasters, desarrollando mis habilidades para hablar en público y potenciando mi capacidad de liderazgo, hasta como voluntario en la mesa directiva del condominio en donde habito.
Si queremos que nuestra sociedad sea mejor, no se dará por generación espontánea; es necesario que nosotros que la conformamos nos comprometamos con los demás, busquemos el bien común no solo como un deseo, sino con acciones concretas: participación en asociaciones civiles que promuevan el cuidado del ambiente, de la movilidad en la ciudad, de la educación, del desarrollo integral de los niños, de la atención a grupos vulnerables, etc.
Pagar impuestos y no trasgredir la ley no es todo lo que debemos hacer para ser considerados "buenos ciudadanos", lo seremos cuando aportemos ese extra que nuestro México pide y que en nuestra ciudad se haría más evidente, logrando entre todos una mejor Guadalajara.
El mensaje giró en torno a la responsabilidad social y de cómo en una gira empresarial por Europa le preguntaron cuál era el "índice de participación empresarial" en su ciudad de origen, cosa que comenta que no pudieron contestar al no ser conocido ese factor en este entonces en México y mucho menos medido. Dicho índice tiene que ver con cuántos de los empresarios de la región participan en actividades de índole social, superación personal o de apoyo comunitario, adicionales a sus actividades productivas en su empresa. Se supone que a mayor el índice, mayor participación de los empresarios en asuntos de su comunidad y por ende, mayor bienestar social y "sensibilización" ante las necesidades de la sociedad en su conjunto.
Quise escribir sobre este tema en el blog, pues de inmediato lo extrapolé a la sociedad tapatía en general: ¿cuántos de nosotros participamos en actividades adicionales a nuestras "obligaciones"? ¿O estamos en la creencia de que con cumplir en un trabajo lícito o asistir a la escuela estoy cumpliendo? La reflexión personal fue obligada e hice un recuento de mis actividades en los últimos años adicionales a mi trabajo, resultando una lista muy nutrida y que en todos los casos me ha dejado mucho: desde la misma participación en Toastmasters, desarrollando mis habilidades para hablar en público y potenciando mi capacidad de liderazgo, hasta como voluntario en la mesa directiva del condominio en donde habito.
Si queremos que nuestra sociedad sea mejor, no se dará por generación espontánea; es necesario que nosotros que la conformamos nos comprometamos con los demás, busquemos el bien común no solo como un deseo, sino con acciones concretas: participación en asociaciones civiles que promuevan el cuidado del ambiente, de la movilidad en la ciudad, de la educación, del desarrollo integral de los niños, de la atención a grupos vulnerables, etc.
Pagar impuestos y no trasgredir la ley no es todo lo que debemos hacer para ser considerados "buenos ciudadanos", lo seremos cuando aportemos ese extra que nuestro México pide y que en nuestra ciudad se haría más evidente, logrando entre todos una mejor Guadalajara.
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